De coches lujosos y limusina en Rabat

Un auténtico monumento de la antigüedad es el asentamiento Shellah, cuya construcción se llevó a cabo en el siglo II. Ahora en este lugar queda sólo un fragmento del muro circunvecino, lápida de Abu Hassan, el mausoleo, las ruinas de Sala y el minarete que hoy día son considerados tesoros de la arquitectura del mundo. La principal curiosidad religiosa es la mezquita de Hassan del siglo XII. Es una construcción grandiosa y bella, el proyecto nunca llegó a ser terminado. El parque más grande se llama Jardines Andaluces. La zona del parque fue trazada aun en el año 1915, hoy aquí se ubican preciosos boscajes de naranjos, cipreses y plátanos, hay también muchas flores y árboles exóticos. Las terrazas están embellecidas por fuentes y estatuas, en la parte más lejana se ubica el museo del arte de Marruecos.

Hablando de diversiones en Rabat no se puede sino mencionar los mercados principales y plazas de mercado. Es un verdadero paraíso para los amantes del shopping, no hay tanta variedad de mercancías, souvenires, alfombras y vajilla en ninguna otra ciudad de Marruecos. Las mujeres sin duda estarán encantadas por perfumes y cosméticos que se fabrican a base de aceites esenciales naturales. Los amantes del té podrán escoger algo especial lo que les guste, porque el té es la bebida tradicional de Marruecos.
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