Es una isla pintoresca que deja a uno pasmado por el esplendor de sus playas azules, sus paisajes montañosos y valles color esmeralda. Menorca se la llama a menudo el museo al aire libre por la gran cantidad de sus curiosidades.
La mayor ciudad de la isla, Maon, aquí están reunidos muy cerca uno del otro los monumentos más valiosos de historia y arquitectura. En el centro Ud. verá la iglesia de Santa María, el templo más grande de la isla. Muy cerca se ubica el edificio del Consejo Municipal. Una de las salas está adornada con retratos de políticos eminentes. Los amantes del shopping estarán ansiosos a pasar por la calle Carrer Nou, donde se ubican diversos restaurantes y cafeterías. Aquí se puede comprar ropa, perfume, hay unas joyerías, tiendas de souvenires y comestibles. Cada una de las plazas está adornada con unas preciosas esculturas y conjuntos de palacios. Entre ellas se puede señalar la plaza de Colón, San Francés, Miranda, Conquesta y Bastió. Los mejores bares y restaurantes se encuentran en la zona portuaria, aquí mismo se sitúa la famosa fábrica de ginebra, la receta de la cual permanece en secreto ya durante varios siglos.
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