Si desea relajarse en las bulliciosas zonas turísticas, haga un viaje al pueblo de Halki. Érase una vez, esta ciudad era una de las más grandes y ricas de la isla, pero hoy en día alberga a unas 500 personas. Extraordinarios edificios neoclásicos, varias hermosas iglesias de estilo bizantino y otros edificios históricos preservados recuerdan los viejos tiempos. Muchos turistas vienen a esta ciudad con el único propósito de visitar la histórica destilería Vallindras que se abrió en 1896. El licor Kitron Naxou se produce aquí desde su fundación.
El pueblo de Filoti, ubicado en una zona montañosa muy bonita, ofrece una variedad de atracciones interesantes también. El lugar más concurrido de la ciudad es la plaza central rodeada de magníficos plátanos milenarios. El pueblo es notable por sus edificios religiosos, como la Iglesia de Panagia Filotitissa que data de 1718 y la Iglesia de la Santísima Trinidad que se erigió hace más de 300 años. En las cercanías del pueblo, hay una gran variedad de lugares interesantes para caminar.
En la parte noreste de la isla, encontrará uno de los pueblos más antiguos y pintorescos: Koronos. Todo su territorio puede considerarse un complejo arquitectónico único. El pueblo tiene casas en miniatura con paredes blancas que forman un complejo laberinto de calles estrechas y sinuosas. La plaza central de Platsa alberga varias tabernas tradicionales. Además, los huéspedes del pueblo tendrán la oportunidad de visitar interesantes tiendas de artesanías.
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