Cada año durante más de treinta años, en la ciudad estadounidense de Baltimore, la población local disfruta de la competencia de las llamadas esculturas cinéticas que se mueven sobre el agua y la superficie plana, superando el barro líquido y la arena pegajosa. Tal idea original pertenece a una de las organizaciones benéficas estadounidenses, que transfiere los fondos procedidos para ayudar a las personas que sufren discapacidades mentales.
Durante el festival, verás competidores que demuestran las esculturas en movimiento hechas a mano. Lo que realmente te emocionará es el diseño de las esculturas, que es realmente fantástico y demente. La competencia de los medios de transporte inusuales comienza en la ciudad y termina en la playa. Y duran ocho horas, estas esculturas cinéticas hechas por el hombre cubren un camino de 15 millas.
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