La Zona Roja. Es imposible haber viajado a Ámsterdam sin visitar el famoso Barrio de las Farolas Rojas. El ambiente que reina en este rincón no sólo de noche sino también de día es totalmente especial. El sexo por dinero se ofrece aquí con plena legalidad y en escaparates iluminados con luz roja uno puede observar a mujeres de todas las edades y nacionalidades. Pero tengan cuidado con los carteristas, especialmente los fines de semana, cuando la Zona Roja está atestada de turistas.
Los canales de Ámsterdam. La abundancia de agua en Ámsterdam sorprende a cualquiera. La ciudad debe su segundo nombre de la Venecia del Norte a la gran cantidad de canales (su número exacto es 165). Singel, Heren-, Keizer- y Prinzengracht, se consideran canales principales que cruzan el centro de Ámsterdam. En los alrededores de la Estación Central y la calle Damrak abundan agencias que organizan distintos cruceros por los canales, la única diferencia entre los cuales es el tiempo de espera para comprar los tickets.
Leer más...