Como cualquier ciudad marroquí, Tánger es muy famoso por sus magníficos bazares. El más popular y grande se ubica en la zona central, se llama “Gran Sokko”. Además de gran surtido de mercancías, aquí se puede disfrutar de los conciertos, preparados por los artistas de la calle: encantadores de serpientes, bailadores, ilusionistas y faquires demostrarán a transeúntes su maestría en sus números fascinantes. En el mercado Ud. podrá comprar los souvenires tradicionales, los más conocidos son las joyas de oro, vajillas de plata, alfombras y mantas de lana.
Entre monumentos hay que señalar el Palacio Dar el-Makzen, edificado en el siglo XVII según el mulá Ismael. Durante muchos años servía de residencia para gobernadores, en el siglo XIX perdió su estatus y quedó abandonado. Hoy allí hay dos museos: el de la historia de la época antigua y el del arte marroquí, su patio interior adornado con estatuas y fuentes va muy bien para paseos tranquilos.
Otro sitio remarcable es el museo de la misión diplomática de América. Es que las relaciones entre los EEUU y Marruecos hicieron un papel importantísimo en la historia del país, por esto el museo preserva documentos, letras y pactos de importancia que se formalizaban en el período de las negociaciones. Además, el museo cuenta con una colección excepcional de espejos antiguos.
Leer más...