Antibes si sitúa cerca de Nizza, es una ciudad antigua y bella, un famoso balneario playero. Las primeras asociaciones que caracterizan esta ciudad son las callejuelas viejas, una fortaleza y la costa azul.
El símbolo principal es el fuerte Karré, situado en la parte occidental. Fue construido en el año 1565 y tiene una forma muy diferente a la medieval tradicional - estrella de cuatro puntos. En el siglo XVIII fue fortificada complementariamente según la orden de Ludovic XIV el que la hizo su base militar principal. Precisamente aquí estaba encerrado Napoleón Bonaparte en el año 1794, aquí esperaba la ejecución. La Ciudad Vieja está llena de monumentos históricos y en primer lugar la embellecen el castillo de Grimaldi y la iglesia de Immaculée Concepción. Estos edificios fueron elevados en los siglos XII-XIII y quedaron intactos hasta hoy día. En el siglo XVI el castillo lo hicieron más amplio y en el año 1925 lo convirtieron en un museo dedicado a la historia de la ciudad. En la parte antigua de Antibes habrá algún sitio interesante para los aficionados al shopping, que precisamente aquí se sitúa uno de los mercados cubiertos más grandes de Francia.
Naturalmente, el entretenimiento principal de los turistas es tomar sol en las playas magníficas, perfectamente equipadas para los deportes de agua. En la zona costera hay múltiples restaurantes, bares, tabernas y discotecas, la vida no se hace más tranquila aquí ni de día, ni de noche. En la entrada de la ciudad está abierto un parque grande de entretenimientos, en el cual aparte de atracciones hay un jardín botánico, varios parques y restaurantes. Los huéspedes con sus hijos tienen que visitar el zoo de “Marineland”, donde se puede ver el show de golfines y conocer a los habitantes del mar y divertirse en el acuaparque.
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