La ciudad no es privada de monumentos de valor cultural, entre los cuales se destaca el palacio Estense, y al lado está el santuario Sacro Monte, donde nació la tradición de la procesión religiosa. La procesión se acaba a los pies de la colina, donde se ubica la iglesia de Santa Ana del Monte. Estos monumentos religiosos se consideran como los más valiosos del país, cada año aquí vienen miles de peregrinos que quieren adorar los santuarios y reliquias.
Cerca de la iglesia hay una pequeña aldea pintoresca, donde hasta hoy en día se han conservado unos edificios curiosos de la Edad Media. Paseándose por las calles estrechas, Vd. podrá pasar por las tiendas y comprar recuerdos hechos por los artesanos locales.
En el territorio de la ciudad hay unas villas hermosas, cada una de las cuales tiene valor cultural. Por ejemplo, la Villa Mirabello alberga el museo arqueológico que también cuenta con una colección de obras de pintores italianos. Una colección de pintura aun más grande está expuesta en el museo de Villa Menafoglio Litta Panza. Los aficionados al deporte no deben perder la oportunidad de visitar los campos de golf, que son 7 en los alrededores, además aquí hay un hipódromo, donde uno puede aprender a montar el caballo, y unas canchas de baloncesto. Si Vd. tiene ganas de dedicarse a deportes de invierno, puede ir al lago Varese, donde se organizan regatas de yates y lanchas.
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