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Millones de turistas cada año visitan la capital del Reino Unido lo que no puede sorprender, puesto que Londres posee una cantidad inmensa de curiosidades: casas antiguas y maravillosas, museos suntuosos, parques grandes y bellos y, claro, el encanto británico inigualable. Londres es una ciudad antigua, en el año 43 A.C. los romanos se establecieron al lado del Támesis y la población estaba creciendo durante siglos y al fin el pueblecito se convirtió en una verdadera metrópoli con 7.5 millones de habitantes (12 millones con los suburbios). Nada puede impedirle valorar el tamaño de la ciudad menos la visita de tradicionales pubs ingleses por los que Londres es tan célebre.

El Puente de la Torre.
(Tower Bridge) cruza el Río Támesis y es si duda alguna uno de los puentes levadizos más conocidos en el mundo. A pesar de la opinión que existe, no fueron las dos torres que tiene el puente que le dieron su nombre, sino el Tower of London que está cerca. Fue construido en el año 1894 y, aunque se la vía de comunicación más grande de la ciudad, se da precedencia al transporte fluvial. Ambas levas del puente se elevan cuando pasan barcos grandes. Con esto la altura de elevación corresponde rigurosamente a los parámetros de un cierto barco. El puente se eleva completamente sólo en casos especiales, por ejemplo, para mostrar respeto a una persona, como lo hicieron para Winston Churchill. El Puente de la Torre es por supuesto una de las curiosidades más importantes de Londres. La parte superior del puente es para peatones y desde allí arriba se tiene una vista magnífica de los tejados de Londres. Hay que visitar sin falta el museo de historia de la construcción del puente, además, para turistas está abierta la maquinaria.
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