El primer asentamiento en este territorio fue fundado en el siglo 25 A.C., aquí vivían los soldados romanos retirados. En aquella época la ciudad se llamaba Emerita Augusta en honor del fundador – el emperador Augusto. La Merida de hoy atrae a los huéspedes con su herencia magnífica y una atmósfera relajante.
Una de las curiosidades principales es el puente pendiente, desde el cual se abre un panorama magnífico. Al pasar por el puente Ud. podrá salir a la fortaleza árabe y la ciudad romana. El centro de la ciudad antigua es el teatro, cuya construcción fue llevada a cabo en el siglo XVI A.C., fue un regalo al emperador Augusto de su tío. El teatro ha sido bien preservado y hoy día allí se organizan representaciones y espectáculos. La capacidad de la sala del teatro es para seis mil espectadores, en el verano aquí tiene lugar el Festival anual del arte dramático. Otro edificio antiguo es el Anfiteatro que tiene una extraordinaria forma elíptica. Otrora aquí se daban las batallas de gladiadores, observadas por 14 mil espectadores.
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