Los residentes locales son personas muy amigables con un gran sentido del humor. No están acostumbrados a tener prisa, realizar todos los asuntos de rutina de manera muy responsable, así como dedicar suficiente tiempo para descansar. Todos los ciudadanos son muy respetuosos con la historia de su ciudad y sus tradiciones históricas. También se distinguen por ser aficionados al arte en todas sus manifestaciones. Algunos recordatorios interesantes sobre la historia de la ciudad se encuentran aquí, literalmente, en todas partes. Incluso las bocas de acceso comunes aquí están decoradas con interesantes inscripciones y dibujos memorables. La búsqueda de tales escotillas antiguas ya se ha convertido en un entretenimiento popular para algunos turistas.
Hay que decir que los habitantes de Kolding son bastante buenos con los idiomas extranjeros, muchos de ellos hablan inglés, español e italiano. Sin embargo, son muy reacios a comunicarse en idiomas extranjeros. Los viajeros que quieran causar una buena impresión en los lugareños definitivamente deben aprender algunas frases simples en danés; sin duda apreciarán este gesto.
La gente local tiene una idea especial de 'patria'. Para la mayoría de ellos, la patria no es más que su propia casa familiar, en la cual siempre invierten mucho esfuerzo y dinero. Incluso los pequeños patios de casas antiguas siempre están bien cuidados y limpios. Un amor tan grande por el hogar hace de Kolding una ciudad increíblemente cómoda y bien cuidada.
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